Ir al contenido principal

La Custodia inmaculista de la Parroquia de la Asunción de Siles (Jaén, España)

La Custodia inmaculista de la Parroquia de la Asunción de Siles (Jaén, España)

Breve resumen De entre los bienes legados en  su testamento por don Juan de Ortega Montañés (1627-1708) a sus descendientes destaca una Custodia mexicana de astil de figura con un rico ostensorio en forma de sol que se conserva en la iglesia parroquial de Nuestra Señora de la Asunción de Siles (diócesis de Jaén, España). 

Don Juan de Ortega Montañés (1627-1708) es el personaje histórico más interesante de la historia de Siles, y uno de los más importantes de la historia de la actual provincia de Jaén.

Hijo de una destacada familia del partido de Segura de la Orden de Santiago (con lazos en el Campo de Montiel, Puebla de don Fadrique, Huéscar, etc.), después de estudiar en la Universidad de Alcalá (donde se ordenó sacerdote), pasó al virreinato de Nueva España en 1660 como fiscal e inquisidor (en 1663) del Santo Oficio de la Inquisición en el tribunal de la ciudad de México.

Ahí comenzó una meteórica carrera en la que fue promovido al episcopado en distintas sedes novo hispanas: Durango (Nueva Vizcaya), Guatemala, Michoacán-Valladolid (actual Morelia) y la sede metropolitana de México (en 1699). 

Paralelamente a su promoción arzobispal recibió el nombramiento como virrey de Nueva España durante dos periodos. En 1696 y en 1701-1702.

Murió en Ciudad de México el 16 de diciembre de 1708, a los ochenta y un años tras una vida dedicada al servicio del rey y de la Iglesia.

Los beneficios y cargos de los que disfrutó lo convirtieron en un hombre rico y de enorme capacidad financiera, que supo gestionar con acierto despachando mercedes para sus sobrinos y herederos.

En 1694 otorgó testamento y en él instituyó por heredero a su sobrino don Andrés Patiño Castellanos y en torno a él creó un mayorazgo. A otro de sus sobrinos (don Ignacio de Ortega Montañés) consiguió la concesión, por Carlos II, de un título nobiliario de Castilla y del hábito de la orden de Santiago en 1696.

A su muerte sus bienes fueron objeto de un largo y polémico pleito entre la Iglesia mexicana y sus descendientes, que hasta 1723 no se vio resulto y que permitió el traslado definitivo hasta la península de varios de los bienes que legó vía testamentaria a su localidad de origen.

A partir de 1723 figurarán entre el patrimonio mueble de la parroquia de Siles dos piezas de plata procedentes de este legado. Una lámpara de plata que cuelga aún en la capilla mayor del templo parroquial, y una escultura de la Inmaculada Concepción con un ostensorio eucarístico móvil. 

Ambas piezas ostentan el escudo heráldico del arzobispo Ortega Montañés, pero la lámpara no presenta marca o punzón alguno. La pieza inmaculista sí está profusamente marcada con el punzón de de la ciudad de México, la marca del quinto real novohispano, y la del artífice, el ensayador mayor Nicolás González de la Cueva (activo entre 1701 y 1714). 

Sobre una peana de seis caras, representando temas alusivos a la vida de la Virgen María, se encuentra la imagen de la Virgen, que en su reverso ostenta las armas mayores del arzobispo y virrey Ortega Montañés.

Bibliografía:

Marchal Martínez, José Manuel: “El arzobispo y virrey de México Juan de Ortega Montañés (1627-1708) y su mecenazgo artístico en Siles (Jaén)”, en ARS, Historia/Crítica, Congreso Homenaje a los profesores Luz de Ulierte Vázquez y Pedro A. Galera Andreu, celebrado en junio de 2022 en Alcalá Real (Jaén). EN PRENSA

Entradas populares de este blog

"JERUSALÉN, JERUSALÉN, QUE MATAS A LOS PROFETAS..." (Mateo, 37)

A partir de estos días comenzaré a editar alguno de los artículos de D. Luis Caballero Pozo. La mayoría de ellos se publicaron en la Revista "Lugia" de Valdepeñas, entre los años 1986 y 1999. Comienzo hoy con esta reflexión personal, un ensayo magistral sobre la religiosidad. Espero que os guste. San Mateo el publicano, es único como cronista de la vida de Jesús. El publicano no necesita para irse con Jesús ni milagros, ni portentos, ni palabras. "Ven conmigo" le dice Jesús en Cafarnaum a las orillas del lago de Tiberiades, y Mateo abandona su puesto de cobrador de impuestos para siempre y lo sigue hasta la muerte, sin abandonarlo nunca. Con Jesús va a Jerusalén y allí presencia la culminación trágica de la historia del mundo, el crimen contra Jesús. Jesús habla y Mateo escribe, Jesús hace portentos y milagros y Mateo los consigna cuidadosamente. Mateo teologiza poco por su cuenta, él se ciñe principalmente a consignar lo que oye de la boca de su

Santiago Cortés González: Partida de Bautismo

Traigo hoy otra de las partidas de bautismo de valdepeñeros históricamente destacados. En éste caso se trata de la de Santiago Cortés González (1897-1937), militar, valdepeñero destacado en la defensa del Santuario de Nuestra Señora de la Cabeza entre 1936 y 1937. Santiago de Rafael Cortés y Ana González [Nota: El bautizado contrajo matrimonio con Dominga Camacho Peña en la de la Fuensanta de Martos el día 9 de Agosto de 1923 = Ldo. Rodríguez] En la Villa de Valdepeñas, Provincia y Obispado de Jaén en ocho días del mes de Junio de mil ochocientos noventa y siete años. Yo, D. Manuel Garrido Coadjutor de esta Iglesia Parroquial exlicentia Parroqui y en su Iglesia Parroquial, bauticé solemnemente a un niño que nació ayer a las dos de la noche y le puse por nombre SANTIAGO PABLO, hijo legítimo de Rafael Cortés y Ana González, nieto paterno de Santiago y Gertrudis Carrillo, y materno de Pedro y Bernardina Mesa, todos naturales de ésta; fueron sus padrinos nombrados por sus padres José de

Nuevas fotos en torno al monumento en honor del Capitán D. Santiago Cortés González

Me hace de nuevo llegar, la amable comentarista que proporcionó las otras, procedentes de su álbum familiar, nuevas fotografías del monumento en honor del capitán D. Santiago Cortés González, en el día de su inauguración en 1958. De nuevo mi agradecimiento por su bondad y amabilidad al enviármelas para que las cuelgue en el blog. Una vista de la Plaza, con el monumento colocado en el centro. El monumento y la escultura son obra del genial artista de Andujar, D. Antonio González Orea. En el vértice, colocó una piedra, procedente del Santuario de la Virgen de la Cabeza, para resaltar la relación entre el pueblo natal del Capitán y el Santuario. El monumento fue colocodo tras un detenido estudio urbanístico, desde una perspectiva, que lograra un mayor realce, y que no entorpeciera la visión de la Iglesia Parroquial, y de la casa consistorial, que por aquel entonces era un edifcio de cierto mérito artístico. La venida de las autoridades al acto de bendición e inauguración del monumento. L