Un año nuevo. Felicidades a todos. Llevo uno días perdido, poniéndome al día después de éstos días de vacaciones y he tenido poco tiempo para poder escribir y hablar de lo que verdaderamente me gusta, lo mío, y hacerlo en el blog.
Terminé el año cansado, de la tarea de la universidad, que con su rutina y sinsabores le mina poco a poco a uno, sino descansas y reflexionas acabas mal parado. Éstos días pasados me han servido para clarificar ideas y descansar. El campo le ayuda a cualquiera.
El día 29 fue un día intenso (en todos los sentidos), desde el punto de vista personal. El viernes 29, la Tertulia Cofrade Santo Reino, me concedió el gran honor de ser su pregonero y hablar desde su tribuna material (el primer acto público de la Tertulia) sobre la Semana Santa. Mi oficio me arrastra y no supe hacerlo de otra forma que hablando de historia y de arte. Espero que me sepan perdonar, porque todavía no he terminado de hacer las correcciones al texto definitivo, para hacerlo desde la segunda tribuna: la cibernética. No pude terminarlo en Jaén por cuestiones técnicas (se averió el ordenador,je, siempre oportuno) y se merecen que se lo cuelgue cuanto antes. Son la mejor gente que uno se puede imaginar. El día 27 les pude acompañar en una visita que preparamos a la ruinosa iglesia del Convento de Santo Domingo de Jaén. Quedé admirado de la belleza monumental que conserva, todavía, Jaén en sus escondites.
Y hablaba del campo. Han sido días de no parar de disfrutar de los "placeres" del campo. En todos los sentidos porque los he tratado todos. Desde recoger aceituna (que todavía no hemos terminado de recoger la cosecha...), a la espeleología en una cueva, al cultivo de la vid, a la arqueología con una misteriosa columna visigoda (que me tiene ciertamente interesado) y a la fotografía de la naturaleza (hemos hecho fotos muy interesantes y que iré colgando).
Hablaba de fotos:
Para mi sorpresa, la vida se abre camino. Maltratamos la naturaleza y ella nos sigue pagando con animales asombrosos que se cruzan a nuestros pasos.
Las bicilcletas no sólo son para el verano.
Y termino con una cancioncilla de la que tomé nota éstas fiestas, que me resultó muy curiosa. Se canta en las casas de Valdepeñas cuando los amigos y familiares se visitan para felicitarse las pascuas. Es bastante curiosa, espero que os guste:
"¿De quién es esta casa grande,
con tantísimos balcones?
Es de 'fulano', que tiene muchos millones.
Al kikiriki, al kikiri-cuando.
De aquí no me voy sin el aguinaldo.
Sino me das el aguinaldo,
al Niño le he de pedir,
que te de un dolor de muelas,
que no te deje dormir.
"¿De quién es esta casa grande,
con tantísimos balcones?
Es de 'fulano', que tiene muchos millones.
Al kikiriki, al kikiri-cuando.
De aquí no me voy sin el aguinaldo.
"¿De quién es esta casa grande,
con tantísimos balcones?
Es de 'fulano', que tiene muchos millones.
Al kikiriki, al kikiri-cuando.
De aquí no me voy sin el aguinaldo.