
Su figura desnuda y su historia fueron la excusa para que durante cientos de años los artistas pudieran realizar desnudos sin ser por ello pecaminosos a los ojos de la doctrina. Tiziano o Tinttoreto colgaron su figura desnuda en capillas y oratorios. Es símbolo de pureza y virtud. En Valdepeñas, Susana es el río que recoge las aguas que nacen en sus fuentes y desembocan en otros que las llevan al mar. Pero no sólo es su río, sino que así se nombramaba a Valdepeñas hasta que Juan de Rivadeneyra la llamó "Baldepeñas" el 24 de abril de 1539.
El pasaje del Antiguo Testamento recoge el suceso de que la joven Susana estaba a punto de darse un baño medio desnuda cuando fue sorprendida por dos viejos que le hicieron proposiciones sexuales. Como estaba felizmente casada, los rechazó. Los viejos se vengaron acusándola de adulterio, que entre los judíos estaba castigado con la lapidación. Entonces el profeta Daniel salió en su defensa y demostró que habían sido los viejos los que se habían propasado con ella, y se les castigó.
Las azucenas son la flor de Valdepeñas y el símbolo iconográfico de la Susana bíblica y hasta no hace mucho (hasta que las aguas se contaminaron por no depurarse, ese es otro tema) quien se diera un paseo por la orilla del río podía encontrar ramilletes de azucenas en las márgenes del río.
Pudiera tratratarse de una casualidad, como tantas ocurren en la historia, pero en éste caso no es descabellado pensar que no es una coincidencia, sino el producto de la toponimia, que en su gran mayoría, en Valdepeñas, tiene su origen en la época de la Fundación.
